Comprendiendo la Angustia
Artículo generado por la Psicóloga Paola Atencio
Conozcamos sobre la Angustia
En el mundo actual, el término «angustia» se utiliza a menudo como sinónimo de «ansiedad», pero es esencial reconocer las diferencias entre ambos estados psicológicos.
Tanto la angustia como la ansiedad desencadenan síntomas físicos desagradables en el cuerpo, pero la ansiedad se caracteriza por sensaciones más abrumadoras, que pueden llegar a manifestarse como ataques de pánico, con síntomas como taquicardia, sudoración y dificultad para respirar.
En contraste, la angustia es menos invasiva y puede manifestarse como inquietud o parálisis, dependiendo de su intensidad.
Angustia Una Mente Perdida en la Incertidumbre
La angustia sumerge la mente en un mar de posibilidades infinitas, haciendo que el futuro parezca peligroso. En este punto, la capacidad de controlar los pensamientos se pierde, y lo que suele ser ordinario se convierte en algo catastrófico. Esto da lugar a una serie de emociones en el cuerpo, como inquietud o inhibición.
Desmitificando la Angustia
A menudo se asocia erróneamente la angustia con la falta de éxito y felicidad. La presión social nos insta a superar la angustia rápidamente en lugar de enfrentarla y comprenderla.
Esta urgencia ha llevado a la industria farmacéutica a lanzar numerosas «soluciones» para enmascarar la angustia, mientras que terapias alternativas, como la meditación, el ejercicio y la lectura, también han surgido como métodos para calmar la mente.
Sin embargo, estas soluciones no resuelven la raíz del problema y a menudo resultan en un retorno más intenso de la angustia a largo plazo.
Abrazar la angustia como una oportunidad
La Angustia como Brújula Interna
La destacada psicoanalista Andrea Berger sostiene que «la angustia es la señal de que en cada cuerpo hay algo oscuro, no por ser malo ni negativo, sino en tanto que no es transparente para nuestra percepción.»
En este sentido, la angustia actúa como una brújula que señala la existencia de aspectos internos por descubrir. A través del psicoanálisis y la terapia, es posible revelar y esclarecer lo que se oculta en las sombras.
Afrontando la Angustia con Conciencia
A pesar de su malestar, es fundamental abordar la angustia como un signo que requiere exploración. En el contexto de un psicoanálisis o terapia, la intervención se enfoca en darle significado, permitiendo hablar de ella y comprender por qué ha surgido, con el fin de aprender a gestionarla.
No se Trata de Evitar, Sino de Comprender
Es importante destacar que no se trata de evitar los sentimientos de inquietud y pánico, ya que esta evitación puede generar más frustración a largo plazo. En cambio, se trata de reconocer estos sentimientos y, a través del trabajo en psicoanálisis o terapia, comprender su significado y propósito.
Angustia La Señal de la Libertad de Elección
El filósofo y teólogo danés Søren Kierkegaard afirmaba que la angustia es la respuesta apropiada al descubrimiento de que la vida no está predeterminada y que tenemos absoluta libertad para tomar decisiones, siendo plenamente responsables de sus resultados.
La Angustia como Indicadora de Deseos Profundos
¿Te has preguntado por qué, cuando te encuentras frente a algo que deseas profundamente, la angustia y la ansiedad a menudo se hacen presentes? Esto ocurre porque la angustia actúa como una brújula que señala la importancia de explorar algo significativo en tu vida, y la respuesta no se encuentra en fuentes externas como libros, consejos o medicamentos, sino en tu propio interior.
Conclusión sobre la Angustia
En resumen, comprender la angustia como un fenómeno complejo y enriquecedor es esencial para superarla de manera efectiva. En lugar de buscar soluciones rápidas, abrazar la angustia como una oportunidad para explorar nuestra propia psicología puede llevarnos hacia una vida más auténtica y plena.
El psicoanálisis y la terapia se presentan como herramientas valiosas para desentrañar los misterios de la angustia y aprovechar su potencial transformador.